LOS MEJORES DESTINOS DE EUROPA PARA HACER RAFTING
A pesar del gran desarrollo industrial y urbanístico que ha protagonizado Europa durante los últimos dos siglos, nuestro continente sigue conservando un buen número de espacios naturales en los que la vida continúa mostrando su cara más salvaje y natural.
Así, entre las montañas, valles y bosques europeos fluyen ríos de una bravura excepcional, lo que los convierte en óptimos candidatos para la práctica del rafting, uno de los deportes de aventura en los que la labor de equipo es realmente importante. Quizá por ello esta modalidad ha calado tanto entre los amantes de la naturaleza y de gozar de la vida en compañía. Porque, a diferencia del kayaking, el parapente, el puenting u otras actividades que disparan los niveles de adrenalina de nuestro cuerpo, el rafting implica, normalmente, a un mínimo de siete personas.
Dirigidos por un líder –normalmente, el instructor en las actividades organizadas y contratadas–, los tripulantes del raft –la balsa hinchable que suele estar hecha de hypalon, una mezcla de poliéster y fibra de neopreno– deben coordinarse para remar con sentido y poder atravesar los distintos rápidos con la máxima pericia posible.
Es un deporte exigente, divertido y que, al contar con distintos niveles de dificultad, es apto casi para toda la familia. Si queremos disfrutarlo en primera persona, podemos viajar a estos grandes destinos de Europa para hacer rafting:
GARGANTAS DEL RÍO VERDOM, FRANCIA
Nuestro país vecino ofrece varios ríos que son dignos de figurar entre los mejores destinos de Europa para hacer rafting. Uno de ellos es el Verdon, cuyas aguas –que adquieren una bellísima tonalidad turquesa cuando son bañadas por el sol– fluyen desde los elevados picos de los Alpes, en el departamento francés de Alpes de Alta Provenza, hasta el embalse de Cadarache. En total, posee un recorrido de 172 km, parte de los cuales discurren por unas bellas gargantas que forman uno de los cañones más bellos de Europa.
Una de las mejores maneras de admirar esta maravilla de la naturaleza es recorrer en un raft los 21 km de río que unen las bellas poblaciones de Castellane y Rougon.
La intensidad de los rápidos que nos encontraremos dependerá de la cantidad de agua que sea liberada desde el embalse. Si la presa está cerrada, serán de nivel I, pero pueden llegar a ser de nivel III en abril, cuando las lluvias suelen ser más copiosas. En cualquier caso, el simple hecho de abandonarnos a disfrutar del espectacular paisaje del cañón bien merece la pena.
RÍOS DEL GALCIAR ESTE, ISLANDIA
Islandia, la tierra del hielo y el fuego, es un país salvaje que ofrece todo tipo de aventuras a aquellos que anden buscándolas. En una isla apenas poblada por el hombre, la naturaleza es dueña de todo y los ríos se deslizan a través de parajes vírgenes de insólita belleza.
Viviremos una buena aventura de rafting en Islandia si nos acercamos a Jökulsá-Austari, la garganta del río del glaciar del este. Allí encontraremos un profundo cañón de roca grisácea, cubierta de musgo, por el que corren las gélidas y lechosas aguas, cargadas de sedimentos, provenientes del glaciar Hofsjökull.
El descenso se puede realizar entre los meses de mayo y septiembre, ofreciendo un nivel de dificultad alto.
RÍO ÖTZTALER ACHE, AUSTRIA
La región austríaca del Tirol es famosa por sus escarpadas montañas e interminables valles. Por esas tierras fluyen las aguas del río Ötztaler Ache, que provienen del manto de nieve que cubre el pico más alto de la zona: el Wildspize. Al llegar el calor de la primavera y el verano, la nieve se derrite y el caudal del río aumenta considerablemente, para convertir este territorio en uno de los mejores destinos de rafting en Europa.
La bravura del río es tal, que solo ofrece una sección en la que se puede practicar rafting comercial de manera segura. Se trata del tramo llamado Ötz Inferior, situado justo antes de la confluencia con el río Eno. Aquí nos esperan potentes olas fluviales y rápidos de nivel IV en un recorrido de unos 13 kilómetros.
RÍO SJOA, NORUEGA
El río Sjoa es otro lugar ideal para la práctica del rafting en Europa. Se encuentra en el noruego valle de Heidal y su nombre significa ‘Aguas Blancas’, lo cual es apropiado para un destino de rafting de clase mundial.
Se trata de un río apto para todos los públicos, pudiendo vivir tranquilas experiencias de corte familiar o sortear emocionantes rápidos de nivel IV, dependiendo del tramo que elijamos. Sin embargo, existe un denominador común en cualquier experiencia en el Sjoa: sus hipnotizadoras aguas, limpias y cristalinas, y las impresionantes gargantas profundas que ofrece uno de los ríos más bellos de Noruega.
RÍO ENO, SUIZA
Las aguas del río Eno (Inn, en alemán) saltan alegres por el accidentado paisaje suizo del valle alpino de Engadina, que ofrece tesoros tanto culturales como naturales. Aquí se encuentran enormes glaciares y pequeños pueblos de aspecto medieval y romántico, que suelen atraer a viajeros durante todo el año.
El río Eno es un fluente del Danubio y discurre por tres países –Suiza, Austria y Alemania– ofreciendo la mayor variedad de aguas bravas de Europa, la mayoría de ellas en la parte suiza.
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En Engadina hay diez tramos diferentes donde cada viajero puede encontrar un recorrido que se adapte a su nivel. Entre ellos se encuentra el desfiladero de Giarsun, que regala una de las experiencias de rafting más desafiantes de los Alpes. Este tramo tiene diez kilómetros de longitud, presentando rápidos continuos de clase IV y un entorno impresionante, protagonizado por un cañón de más de cien metros de profundidad.
RÍO NOCE, ITALIA
Cerca de la frontera italiana con Austria y Suiza, se encuentra otro de los mejores destinos de Europa para hacer rafting. Allí, en la región de Trentino-Alto Adigio fluyen las aguas del río Noce. Alimentado por el derretimiento de los glaciares alpinos, el Noce atraviesa el hermoso Val di Sole (Valle del Sol), que se halla encajonado entre los hermosos montes Dolomitas.
En invierno, la zona recibe a esquiadores llegados de todos los rincones de Europa, pero en verano la atracción turística número uno es el rafting.
El Noce ofrece algunos de los rápidos más emocionantes de los Alpes, incluida una espectacular serie de rápidos de Clase V a través de las gargantas de Mostizzolo. Para aquellos que busquen algo más tranquilo, hay secciones del río que presentan obstáculos más sencillos.
PIRINEOS, ESPAÑA
Y, por supuesto, los Pirineos españoles también acogen buenas opciones para los amantes del rafting. Por un lado, el río Noguera Pallaresa es el decano del rafting en nuestro país. Sus aguas bravas nos ofrecen muy buenos rápidos de nivel IV en el tramo de 14 kilómetros que une las poblaciones de Llavorsí y Rialp. El mejor momento para disfrutar de una experiencia emocionante en este río es entre mayo y junio, aprovechando el aumento de caudal provocado por el deshielo.
Otra gran alternativa de rafting en España es el río Gállego, situado en el Pirineo Aragonés. Es uno de los principales afluentes del Ebro y posee una longitud de algo más de 190 kilómetros. Además de rafting, en el Gállego también se organizan actividades de barranquismo y kayaking.
Sus aguas proporcionan opciones para todos los niveles. El tramo de Murillo de Gállego a Santa Eulalia es el más familiar, con rápidos de clase II, mientras que los que aman la adrenalina prefieren la sección, de diez kilómetros de longitud, que lleva de Carcavilla a Murillo de Gállego, con rápidos de clase III y IV.
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