48 HORAS EN CANNES
Un maravilloso viaje exprés, apenas 48 horas en Cannes, nos dio la oportunidad no solo de conocer a Lucia Penrod, CEO de Nikki Beach, y el nuevo restaurante que lleva su nombre, una aventura con la que la cadena se aleja de su etiqueta veraniega para vincularse aún más con la gastronomía mediterránea y el lifestyle. También fue la excusa, cómo no, para recorrer uno de los destinos más exclusivos del mundo.
Si bien es verdad que Nikki Beach, los famosos beach clubs –con más de un cuarto de siglo de vida– cuentan con embajadas en destinos como Miami, Marbella e Ibiza, nunca se había atrevido (por completo) a conquistar el encanto atemporal de Cannes.
“Nikki Beach forma parte de la historia de Cannes desde hace casi dos décadas. Hemos organizado muchos eventos durante el Festival de Cine, nuestro equipo siempre ha sentido una fuerte conexión y cariño con la zona e incluso nuestra directora global de operaciones es de aquí”, comenta Penrod. "Estando Cannes y su icónica Croisette a medio camino entre nuestros beach clubs de Saint-Tropez y Monte Carlo, lógicamente, se convirtió en el punto perfecto para ofrecer a nuestros clientes una nueva experiencia en la región".
Se refiere a la apertura de Lucia, un nuevo restaurante –que lleva su nombre y que se inspira en el latín lux (luz)– con el que Nikki Beach ha roto todos los esquemas que conocía hasta ahora: abierto durante todo el año –de ahí que se escape de su categoría beach–, apuesta por alargar la temporada del destino, así como por acoger el maximalismo, los colores vibrantes y estampados de lo más exagerados concebidos por la artista italiana Chiara Perano.
Todo con el propósito de llevar a la mesa la cuisine du soleil, con platos frescos y especiales (y siempre haciendo un guiño a la dolce vita) como un crudo de atún a la nicoise, la ensalada de naranja siciliana con limón de Menton y sorbete de pomelo; el cavatelli gratinado o la zuppa di pesce con gambas, calamares y mejillones.
“Nos dimos cuenta de que Nikki Beach no podía mantener su presencia durante todo el año en La Croisette, ya que es más un centro urbano que un destino de ocio estacional. Por lo tanto, nuestro objetivo fue crear un concepto que pudiera prosperar durante todo el año, abarcando las cuatro estaciones en lugar de centrarse exclusivamente en el verano, la temporada característica de Nikki Beach. La Croisette, con su ambiente diverso, proporciona un escenario ideal para este nuevo concepto”, añade Pernod.
Nuevo sí, pero perfectamente compatible con una ciudad que deberías visitar al menos una vez (o dos) en la vida. Así que la propia Lucia, que ya lleva dos décadas visitándola para su Festival de Cine, nos contestó a la pregunta: ¿qué hacemos y qué vemos aquí?
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COMPRAS
"El mercado de flores de Marche Forville es increíble y la selección de quesos de Ceneri es una de las mejores del mundo. Me encanta Le Shop 17 y 55 Croisette, pero, si caminas por La Croisette o Rue d’Antibes, encontrarás tiendas increíbles y diseñadores franceses únicos que no hay en ningún otro lugar. Un poco más lejos,espera la boutique Fragonard en Rue Jean Jaures, que tiene una variedad de perfumes, jabones y productos para el cuidado de la piel inspirados en la Riviera francesa y Galimard Parfumeur, otra excelente opción de perfumería donde puedes crear tu propio aroma personalizado”.
COMER Y BEBER
“Para tomar un vino, La Cave es un acogedor restaurante que cuenta con una gran selección de vinos locales. Luego, para una una cena animada me encanta Salama por su comida marroquí. También estuve en su local en Saint-Tropez y siempre hay mucha energía y los platos son perfectos para compartir con un grupo. Anna y Baoli también son geniales para pasar una noche divertida. Durante el día para almorzar me encanta Bobo Bistro o La Casa Di Nonna. Y si estás dispuesto a irte un poco más allá, a las afueras de Cannes, puedes disfrutar de una increíble comida italiana en Chez Mamo, en Antibes”.
DÓNDE DORMIR
“Los últimos 18 años me he hospedado en el Carlton, que está justo en La Croisette y convenientemente ubicado a 3 minutos andando de Lucia. Tienen un hermoso salón de té en el lobby y también un excelente brunch dominical con música en vivo. Pero si lo que apetece es salir a desayunar fuera, Maison Charlotte Busset es otra excelente idea, con repostería artesanal y bollería. Hagáis lo que hagáis, pedid su pain perdu y un cappuccino.
JW Marriott está justo al lado del Carlton y es otra maravillosa opción. De hecho, celebramos ahí uno de los pop-ups que hicimos con Nikki Beach en el pasado”.
FUERA DE TEMPORADA
¿Es posible disfrutar de Cannes más allá del verano y la primavera? ¿Alguna actividad que valga la pena mencionar? “Cannes es un destino magnífico durante todo el año. Realmente no hay temporada baja, ya que la ciudad está llena de actividad durante todo el año, pero, por supuesto, los turistas llegan en masa durante los meses de verano. Si vienes en los meses más tranquilos, recomiendo caminar por l'Esterel, Théoule-sur-Mer o por Cap d'Antibes en un día soleado”.
“Muchas compañías de barcos en Cannes operan durante todo el año, por lo que puede reservar un recorrido privado incluso fuera de temporada. Hay algunas islas cercanas, como Île Sainte-Marguerite e Île Saint-Honorat, que valen la pena visitar. También se puede organizar una visita a viñedos y bodegas locales para realizar degustaciones y recorridos, o disfrutar de un día de mimos en uno de los muchos spas y centros de bienestar de Cannes: me encanta el Spa Villa Belle Plage en particular, una antigua residencia del siglo XIX con una sauna circular fabricada en el Himalaya con ladrillos de sal rosa, hamman, tratamiento watsu en la piscina y tratamientos para potenciar el bienestar, detox, recuperación y vitalidad”.
QUÉ VER
“Mi muy querida amiga y nuestra directora de operaciones, Celia Gumbau-Serra, es una experta en qué hacer en la zona y fue la que me recomendó tres museos en Vallauris: el Museo Nacional Picasso en una capilla románica, el Museo Magnelli y el Museo de Cerámica. El castillo de Vallauris, antiguo priorato de la abadía de Lérins, fue reconstruido en el siglo XVI y es uno de los pocos edificios de la época renacentista de la región. De hecho, es el hogar de Guerra y Paz”.
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